Adela Ramírez
Imagine que puede entrar en su mente como si fuera una mansión infinita, recorrer pasillos con retratos de su infancia, abrir una puerta y encontrar la receta de lasaña de la abuela, y al fondo, en una biblioteca secreta, los nombres de todos los emperadores romanos en orden. No es ciencia ficción. Es el Palacio Mental —una técnica ancestral que convierte su memoria en un lugar físico (¡aunque sólo exista en su cabeza!).